La SEME ha lanzado su último informe sobre el impacto de la medicina estética en España. Los datos son alentadores: aumenta el número de tratamientos, crece la facturación, disminuyen los prejuicios. No obstante, a mayor ejercicio de la actividad, también se alarga «una de las mayores sombras que persiguen a la medicina estética», como advertía la Dra. Petra Vega: el intrusismo.
Decía la doctora que falta mucha concienciación a la población sobre este tema. Estamos de acuerdo; y nuestra labor es acompañaros en esa tarea de divulgación. Sin embargo, por la naturaleza de nuestra revista, también nos toca dirigirnos a vosotros, los profesionales. La concienciación, hacia vuestro lado, debe ser siempre la de seguir formándoos.
Es, por ejemplo, lo que nos dice la Dra. Joaquina Louro Castro, especializada en urgencias, en el que quizá sea el artículo más importante de este número. Louro nos recuerda la necesidad de una formación constante en esta materia, y de que sean los propios profesionales quienes la demanden. No podemos confiarnos a un título: ampliad, refrescad, insistid en vuestros conocimientos.