¿Fantasía o realidad?
En peluquería creativa siempre hacen falta grandes dosis de fantasía e imaginación para motivar el trabajo del artista, para complementarlo y hacerlo posible. Y también de artificio. Arquitecturas internas, pelucas; fotografía y retoque. Pero…
- ¿En qué medida hacen falta, o son justas?
- ¿En qué momento pasa un look de ser artesanal a un artilugio más de ingeniería que de peluquería?
- ¿Cuándo pasa una herramienta de ser considerada admisible para elevar un estilismo, a invasor que se apodera de un terreno ajeno?
La llegada de la inteligencia artificial a la peluquería nos hace plantearnos –de nuevo– estas preguntas para las que no tenemos una respuesta ni posición definida. Hemos hablado con algunos profesionales que tenían bastante que decir al respecto, hemos reflexionado sobre sus argumentos, y seguimos sin tenerlo claro. Lo que sí podemos afirmar es que hemos disfrutado, y mucho, de las colecciones que han realizado con este nuevo “juguete”.
¿Es la IA el futuro? De momento, hoy, forma parte de nuestro presente. Disfrutémoslo.























































